El mercado laboral en EE.UU. continúa dando señales de enfriamiento. En julio, las vacantes de empleo cayeron a 7.18 millones, por debajo de los 7.38 millones esperados. Este retroceso refleja la presión de los aranceles y las restricciones migratorias, factores que vienen afectando a la economía estadounidense.
Las contrataciones se mantuvieron débiles, mientras que los despidos aumentaron. Esto prepara el terreno para un informe de empleo más modesto este viernes, con economistas anticipando solo 75,000 nuevos puestos en agosto.
La situación refuerza los comentarios recientes del presidente de la Fed, Jerome Powell, quien dejó entrever la posibilidad de recortes de tasas en septiembre. Sin embargo, Powell advirtió que la inflación sigue siendo una amenaza y que el desempleo podría subir a 4.3%.
En el último trimestre, el empleo apenas creció en promedio 35,000 puestos mensuales, frente a 123,000 en el mismo periodo de 2024. Este debilitamiento confirma la desaceleración provocada por las políticas comerciales y marca un punto clave para la política monetaria de la Reserva Federal.