Nos hemos pasado este 2024 ignorando problemas como escasez de energía, cambio climático, conflictos en Ucrania y Medio Oriente, problemas que realmente podrían haber perturbado la estabilidad y rentabilidad de los mercados. En cambio, las noticias que han guiado a los mercados se han centrado mucho más en la inteligencia artificial, un crecimiento económico resistente y tasas de interés más bajas, con aparente poca preocupación por quién ocupe la Casa Blanca.
Al cierre del mercado el día de las elecciones, el S&P 500 había subido un 21,93% y el Nasdaq 100 un 24,88% en lo que va de año, mucho mejor que el rendimiento promedio en lo que va de año de las elecciones presidenciales, que se remonta a 1950, de casi un 5%.
Sí, tan solo 5%.
De hecho, 2024 ha tenido la mejor racha de 10 meses para las empresas estadounidenses de cualquier año electoral desde 1936.
Inmediatamente después de la victoria de Trump, los mercados tuvieron una reacción entre emoción y pánico.
Algo que he aprendido durante mis 14 años en este negocio, es que al tiempo no le importa quien se sienta en la Casa Blanca, ni el golpe económico que puede dejar una pandemia o una guerra. El mercado, eventualmente, se ha movido hacia arriba y hacia la derecha.
Con el tiempo, el verdadero ganador es quien invierte a largo plazo.
En este gráfico puedes ver todos los procesos electorales (puntos amarillos) y todas las recesiones que ha vivido la bolsa estadounidense (barras grises).
Básicamente, en las últimas cinco décadas, independientemente del punto de partida de una inversión en la bolsa estadounidense ha dado sus frutos. Quizá no siempre en un año, o en dos, tal vez tres. Pero a lo largo de cinco, diez años o más, todo inversionista ha sido premiado por el tiempo.
Y a pesar de la angustia que mucha gente vivió durante el conteo de votos, al mercado no le importa quien vaya a sentarse en el despacho presidencial.
Esta semana, The Financial Times mencionó que el S&P 500 obtuvo una rentabilidad total anualizada superior al 10% durante todos los mandatos presidenciales (excepto uno) desde Jimmy Carter.
Y sólo durante un periodo (tras la primera elección de George W. Bush en 2000, durante el colapso de la burbuja tecnológica) las acciones terminaron a la baja 12 meses después de unas elecciones.
Esto no significa que no vayamos a experimentar una mayor volatilidad ahora que el proceso electoral terminó. Hay muchos factores que afectarán a las empresas en lo que queda de este 2024 y más allá. Y para cualquier empresa individual, las acciones de un presidente siempre pueden ser impactantes.
Así que, en este y en todos los tiempos de alta volatilidad e incertidumbre, recuerda los principios básicos de un Bold Investor:
– Invierte capital que no necesites en los próximos 3 o 5 años.
– Invierte en un negocio en el que creas y creas que puede cambiar el mundo.
– Invierte en al menos 20 empresas.
– Apóyate de ETFs.
– El tiempo es tu mejor aliado, se paciente.
– Tu capacidad de ahorro es el mayor indicador de probabilidad de éxito en tus inversiones.
– Mantente en el juego, aquí no tiene éxito quien gana más sino quien sobrevive más tiempo.
Y si en algún momento sientes que te gana la ansiedad, mira el gráfico que está arriba y recuerda que el mercado, eventualmente, se mueve hacia arriba y hacia la derecha.
